TRANSLATE

Saturday, March 6, 2021

Antropólogos y sociólogos podrían especular con las diferentes maneras de vivir la muerte.

 Tus recuerdos en Facebook

Tango Uruguay, tú nos importas, al igual que los recuerdos que compartes aquí. Pensamos que te gustaría mirar esta publicación de hace 6 años.
fragmento
Antropólogos y sociólogos podrían especular con las diferentes maneras de vivir la muerte. Podría pensarse que la alianza clasista que define la matriz peronista explica esta comodidad ante la extinción física. Los ricos tienen las herencias, los panteones familiares, los nombres de calles y otros legados públicos para aliviar la finitud con eternidad bien tangible. Los pobres tienen un frondoso santuario, con hitos sacros y paganos, para mirar la muerte a los ojos sin horror. (No casualmente, la inmortalidad de Kirchner está cimentada en monumentos oligárquicos y en adoratorios populares, todo a la vez).
Las clases medias, en cambio, reaccionan más fóbicas ante la muerte, quizá por un déficit de recursos culturales para esquivarla emocionalmente. Su pensamiento es más racionalista, menos mágico, más agnóstico (incluso en familias religiosas), más cientificista: para la medicina de hoy, morir es fracasar. Y eso se reflejaría, siguiendo esta lógica, en la reacción política “gorila” cada vez que a un jefe peronista se le escapa un ataúd. Ese féretro es, para la sensibilidad antiperonista, lo que Roland Barthes llamaba el “punctum” de una foto: ese agujero negro por el cual se escurren todas las interpretaciones intelectuales de un escenario, y solo queda un vínculo emocional directo, único, inexplicable. Una imagen que vale más que mil relatos.
* Editor Ejecutivo de NOTICIAS.

No comments:

Post a Comment