La cuarta temporada de la serie The Crown (2016-) contó con la aparición de Lady Di (interpretada por Emily Corrin).
Cuando la vi, además de que me encantó su actuación, pensé si el Príncipe Carlos se preguntaría cómo hizo el actor Josh O’ Connor para sacarle tan bien los gestos.
La figura de Ladi Di, como una mujer comprometida, que caminaba entre minas terrestres y abrazó a un muchacho con HIV, antes de que se sepa que eso no era contagioso y que se preocupaba por causas que a la Corona británica no parecían interesarle mucho, siempre me fascinó. Y mentiría si les dijera que no sospechaba que su historia iba a terminar mal. Diana Spencer luego de su divorcio con el Príncipe Carlos era una mujer libre, volvía a ser soltera y además, siempre había sido hermosa.
El 31 de Agosto de 1997, yo era una adolescente que se enteraba de lo que todos se estaban enterando y que lo viví, como casi el mundo, con mucha tristeza. Testigos claves que fueron desapareciendo de la escena del accidente, sumado a que la (ex) Princesa permaneció mas de 40 minutos desangrándose en el Túnel del Alma, en pleno centro de Paris, es algo que me hace dudar de que se haya tratado de un accidente. La verdad en estos casos, dado la cantidad de dinero y poder involucrados en el caso, nunca la sabremos con certeza.
Mi sueño en ese entonces ya era conocerla. Y lo cumplí 5 años después de su muerte, cuando viajé a Londres por un mes y visité todos los lugares que habían significado algo para ella. Kensington Palace, la Capilla donde se casó y la Abadía de Westminster, donde la velaron, entre otros.
La princesa que voluntariamente había dejado de ser parte de la realeza y que deseaba ser recordada como la “Reina en los corazones de la gente”, hoy, a casi 24 años de su fallecimiento, sigue siendo mas importante que cualquier miembro de la Casa real inglesa que esté vivo.
Luciana Palermo.
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