La actriz Rosalinda Celentano interpreta a Satanás, en La Pasión de Cristo (2004, dir. Mel Gibson).
Como dije en algún post, sólo aparece por unos minutos en el film, sin embargo logra generar pavor, dejando una impresión bastante fuerte en el espectador.
Interpretar al ser que Jesús definió como “homicida desde el principio” y “padre de la mentira” y lograr un efecto en la audiencia, no debe ser tarea fácil. Menos en el Séptimo arte, donde abundan los films de terror y horror. Sin embargo, todavía recuerdo la sensación que tuve la primera vez que la vi en el Cine. Fue una mezcla de espanto y repulsión, que seguramente es la que Mel Gibson quería que tengamos.
Hoy el post sobre esta película tuvo muchos comentarios positivos y eso me alegra. Algunos piensan que lo hice para que llegue el mensaje de Jesús y tendrán razón. Pero el mensaje que mas quiero que les llegue es este. Satanas no era el enemigo de Jesús solamente. Es el enemigo de todos los hombres. Y a los que no crean en la existencia de Jesús, ni en su definición sobre el diablo, los invito a que miren a su alrededor.
Cuántas personas conocen que hacen EXACTAMENTE los deseos del diablo? Esto es, que hacen totalmente lo opuesto a lo que pidió Jesús que hagamos, que es amar al prójimo.
Cuántos se mueven impulsados sólo por su deseo dañar al otro? Que, lo sepan o no, es el deseo del diablo. En palabras de Jesús, nuevamente, cuántos vienen a este mundo como el enemigo a “robar y destruir.”
Son mayoría, no? Compañeros de trabajo que nos envidian y nos acosan. Abuso sexual, encubrimiento, palabras que se dicen motivadas por la maldad y por la mentira y actos que intentan eludir toda responsabilidad del hombre por sus actos, responsabilidad de la que nos habló Jesús (y de la que todos tendremos que dar cuenta algún día).
Están en todas partes, continúan murmurando y matando el alma, tal como en la Palestina del siglo I, en todos los grupos humanos. En todos los grupos de personas cuyo sentido de pertenencia es superior para ellos que sus propias conciencias.
No hay nada nuevo bajo el Sol. Personas con cargos de autoridad que son corruptos y miran para otro lado, porque total, así es mucho mas fácil. Todos son parte del mismo problema.
Si bien es cierto que todos somos pecadores (y es importante que lo comprendamos), algunos olvidaron el Camino hace mucho. Y quizá, hasta se encuentran en un lugar espiritual que esté más allá de la redención.
Que Dios misericordioso nos libre de eso.
Buenas noches a todos!
Luciana Palermo.
No comments:
Post a Comment